Los motores del Atlético Che Guevara han vuelto a ponerse en marcha esta tarde en el estadio de La Vila. Los revolucionarios disputaban su primer partido de la Liga 2.0 contra el Vodka Juniors y han demostrado por qué fueron los campeones de la pasada campaña.
El enfrentamiento se ha iniciado con un gol del astro mediático Joshua, pero el juego del conjunto Guevarista no era fluido, el parón de tres meses alejados de los terrenos era fácilmente apreciable, pues los guevaras no conectaban con su habitual precisión. Por ello, su oponente, bajo la batuta de Esther Marco, pudo plantar cara y darle un giro al resultado, anotando tres goles consecutivos que encendían las alarmas del equipo rojinegro, que sin brillar excesivamente pudo igualar el partido al concluir la primera parte con los tantos del incombustible César y nuevamente el “10” guevara, apareciendo cuando más se le necesitaba.
A partir de ese instante, el transcurso del match dio un vuelco trascendental sobre el campo; en apenas 5 minutos, Boixet, Joshua (anotando así el hattrick en su cuenta particular) y de nuevo Boixet, gracias a su letal conexión con el “10” fruto de su compenetración descomunal decantaron contundentemente la disputa de los 3 puntos hacia los Che. El toque parecía haber renacido en la segunda parte y los jugadores se entendían a la perfección, recordando al equipo que fue imparable en la pasada temporada.
Boixet volvió a perforar las redes de la portería Junior y poco después lo haría por cuarta vez el Capitán rebosante de confianza y desmesurada calidad, dejando clara la intención de lucha por la bota de oro (premio que ya luce en sus vitrinas).
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| Rai, en un momento indeterminado del partido |
Inesperadamente, el gran especialista, analista y experto del fútbol en todos los parámetros, Adri, reapareció en el césped después de un largo tiempo apartado por culpa de una lesión, su incorporación será fundamental de cara a la actual campaña por ser una pieza clave para los Che. Y hablando de incorporaciones cabe destacar el gran debut de César, Vicky, Enric, Miguel y sobretodo Raimon, que desde su entrada en el terreno de juego ejerció de jefe de la zaga, yendo al corte con veteranía y sacando la pelota jugada con calidad extrema. Una grata sorpresa para los Guevara.
Un gol del Vodka sirvió para maquillar un poco el resultado en el segundo tiempo pero las posibilidades de cambiar el destino del encuentro eran prácticamente inexistentes en los escasos minutos que restaban ya que el Atlético se mostró intratable.
Finalmente, Santi, tras una gran internada de Mire por la banda, redondeó el marcador añadiendo el 9-4 definitivo en un partido reñido en su inicio pero que que fue tintándose de rojo y negro de la mano de su grandísima plantilla, y de su eterno capitán.
